domingo, 19 de junio de 2011

EL TELÉFONO


Tu novia me llamó justo cuando sentí un disparo al aire. Me dijo que ya no estaban juntos. Que nunca lo estuvieron. Yo me reí y me limité a escuchar. Le dije que si quería podía venir. Me preguntó si la podía ir a buscar. Le dije que no. Que no era para tanto. Ella era la que quería. Yo estaba feliz viendo un documental en I-SAT. Ella me dijo que le daba miedo ir sola. Le dije que después me avisara. Fue una amable forma de cortar, consideré. No me gusta hablar por teléfono.

Ella hablaba sin parar y yo hacía que la escuchaba mientras miraba los subtítulos en la televisión. Me dijo que creía que te gustaban los hombres. La misma historia que pensaban tus "mejores amigos". A mí me daba lo mismo. De muchas personas se arman historias que no interesan si son verdad o no. Tu novia -que nunca fue tu novia- me producía desconfianza. Tomé mis resguardos. Suponía que se venía una historia de ciencia ficción o de farándula asquerosa. Ese modo de vivir, el que promueve la tele, llegó a la gente. Y ahí tenemos facebook y twitter. La realidad que no es.
Donde un tipo que tira cables puede sentirse parte del rock. En Chile no hay bandas de rock. La única que existe vive en México. Lo demás, son malos intentos. Fother Muckers pintaban para buenos, pero tengo la sospecha de que no era pa' tanto.

Eso que tú le llamas rock, como "forma de vida", es Américo. Él sí. Tu no-novia, no. Muchos "no" juntos. Errores que no impresionan. Acá lo central y lo que deberías saber es que ella no te cambió por otro, te cambió por ti. Y que tiene un romance e intenta ser feliz. Yo no sé mucho más. A veces me llama por teléfono, pero es poco lo que contesto.